Centralita del coche: la ECU, su función, partes, averías y reprogramación

Las siglas ECU significan Electronic Control Unit, Unidad de Control Electrónico en español, y también se suele llamar centralita del coche. En más de una ocasión se ha comparado con el cerebro del vehículo, aunque aquí vamos a tratar de ser algo más exactos.

Qué es la ECU

La ECU o centralita es un ordenador que centraliza toda la información del motor, con las que toma decisiones y adapta su funcionamiento a cada circunstancia. Controla componentes tan importantes como la inyección de combustible, las bujías, la presión del turbo y la válvula EGR, los ventiladores del sistema de refrigeración, etc. Además, permite que el motor rinda prácticamente igual, independientemente de la presión atmosférica o la temperatura (por poner unos ejemplos básicos).

Sin embargo, hoy en día no se puede hablar de un solo “cerebro” ya que existen varias ECU especializadas en cada parte del coche. Aunque normalmente, cuando hablamos de ECU o centralita a secas, estamos hablando de la que se ocupa del motor y algunas funciones más.

El resto de centralitas han ido apareciendo, para quitar algo de peso a la ECU principal, debido a la gran cantidad de cálculos que deben hacerse en los coches modernos. Estas pueden ser: una dedicada al control de estabilidad, otra para los airbags y otras funciones de seguridad, para el panel de instrumentos, para las puertas, retrovisores y ventanillas, los asientos, etc. Pueden ser tantas, que algunos coches llegan a tener casi 100, aunque la mayoría son sencillas y de pequeño tamaño.

¿Qué función tiene la centralita de un coche?

Las centralitas o ECUs se encarga de orquestar todos los elementos del coche relacionados. Antiguamente los motores funcionaban sin electrónica, lo que no les permitía adaptarse tan bien a las diferentes condiciones de trabajo. Ahora la centralita del motor tiene en cuenta factores como la presión del aire, la temperatura, la posición del árbol de levas, el cigüeñal y la mariposa, los gases de escape, las revoluciones y un largo etcétera de datos.

Además de ello también registra todo aquello que ocurra en el motor que esté fuera de lo normal. Así los mecánicos solo tendrán que conectar a ella mediante una máquina de diagnosis para leer los datos grabados y ver qué es lo que le pasa al motor.

En definitiva, el funcionamiento de la centralita de un coche se puede dividir en:

• Recibe datos de entrada: La centralita recibe datos de los diferentes sensores y detectores que tenga conectados. En el caso del motor serán por ejemplo los sensores de revoluciones, los sensores de la posición del cigüeñal y el árbol de levas, el sensor de flujo de aire o los sensores de picado de bielas.
• Realiza cálculos: la centralita usa todos los datos para tomar las decisiones que tenga programadas. Por eso necesita cierta capacidad de procesamiento para que su toma de decisiones sea muy rápida. Esto es muy importante para el correcto funcionamiento del motor. Por ejemplo si se detecta picado de bielas, tiene que decidir apagar el motor o entrar en modo de emergencia muy rápido para evitar daños.
• Envía señales de salida: la centralita manda las señales adecuadas para que los actuadores funcionen como se requiere. Por ejemplo: aumentar la inyección de combustible para evitar que el coche se cale si bajan demasiado las revoluciones (de ahí los típicos tirones). También son buenos ejemplos, los actuadores ubicados en los frenos que permiten accionar el ESP o la válvula EGR, que se abre o cierra en función de los gases de escape detectados.
• Almacena información: cada error de funcionamiento o datos anómalos son almacenados en la centralita del motor. Por ejemplo, un sensor de presión del turbo, que indica que el turbo no sopla con la fuerza esperada. Datos que se podrán leer si nos conectamos a la centralita mediante una conexión OBD.

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Partes de una centralita del coche

Para poder realizar todo esto, la centralita del coche o ECU tiene una gran cantidad de partes en una placa de circuito impreso. Con lo que se asemeja a un ordenador como el que usamos en casa o en el trabajo, aunque sin disco duro convencional, además de procesadores y memorias específicos para su tarea. Estas partes son:

• Interfaz de entrada: donde recibe todas las señales provenientes de los diferentes sensores y convierte las señales digitales para la comprensión del CPU.
• Interfaz de salida: que convierte las señales digitales de la centralita y su CPU para que sean comprensibles para los sensores y actuadores del motor u otros aparatos controlados por la centralita.
• Unidad central de procesamiento (CPU): es el procesador o procesadores que reciben los datos, realiza los cálculos y envía una respuesta en función del programa. Sirven para controlar el motor, los sistemas de control de tracción, los sistemas de frenado electrónico, las transmisiones automáticas y todo lo que gestiona la ECU. Como te hemos dicho antes, en muchos casos cada sistema tiene su centralita.
• Memorias de almacenamiento:
  • Memoria de solo lectura (ROM): que cuenta con la información básica
  • Memoria programable (EEPROm / Flash): esta información sí puede ser cambiada. Este tipo de memoria es el que se manipula a la hora de reprogramar una centralita o de clonarla si se ha averiado.
  • Memoria de acceso aleatorio (RAM): son datos temporales que se usa según los requerimientos y puede ser escrita y reescrita muchas veces. Igual que en un ordenador convencional.
• Fuente de alimentación: es la parte que suministra energía a toda la centralita y regula la corriente eléctrica.
• Otros componentes electrónicos: aquí se encuentra todo lo necesario para suministrar la energía a la centralita y mantenerla estable, coordinar sus componentes y proteger la centralita. Por lo tanto dentro de este apartado nos encontramos por ejemplo con:
  • Condensadores: que sobre todo se encuentran en la fuente de alimentación, pero también en algunas zonas de la centralita para mantener en voltaje estable dentro de ella y en los sensores con los que se comunica.
  • Diodos: que permiten que la corriente fluya en un sentido pero no en otro para proteger la centralita
  • Drivers: con lo que se controla por ejemplo las bobinas de encendido que hay sobre las bujías
  • Relojes o cristales: que regulan la velocidad a la que las instrucciones se ejecutan en el procesador o procesadores y los sincroniza con el resto de componentes de la centralita.

Averías de la centralita del coche

Las centralitas están muy protegidas dentro del vehículo, por eso no es común que se averíen. Aun así, cuando se averían suele ser por dos motivos principales:

Humedad en la centralita del coche

En este caso los daños pueden ser difíciles de reparar. Lo mismo que ocurre cuando se moja cualquier aparato electrónico complejo. Por eso muchas veces se cambia por otra de segunda mano si la hay y se clona la información de la centralita dañada. Aunque también pueden repararse los elementos dañados.

Los daños más comunes por el agua dentro de la centralita son:

• Fuente de alimentación dañada: lo que supone cambiar varios componentes dentro de ella.
• Además, la humedad puede suponer que aparezcan puntos de soldadura con corrosión por óxido en varios puntos de la centralita.

Subida o bajada de tensión

Como has visto en el apartado de las partes de la centralita, está llena de condensadores y otras medidas de seguridad para mantener la tensión estable dentro del circuito. Sin embargo, en algunas circunstancias se pueden sobrepasar las capacidades de estos y acabar dañando algo. En estos casos las averías más comunes son:

• los propios sistemas reguladores como los condensadores o capacitores. Por ejemplo, condensadores dañados por el pico de tensión o que han perdido la capacidad de condensado con el tiempo. También puede haber sido dañado algún diodo.
• también puede ocurrir que algún punto de soldadura del circuito se fisure por exceso de intensidad de la corriente. Lo que supone soldarlo.
• Pista quemada: que se suelen solucionar haciendo puentes externos a la placa de circuito impreso. Por ejemplo, soldando un hilo fino sobre la pista quemada que haga de conductor
• Transistor dañado: puede ser un transistor de salida dañado o un transistor regulador de 5V dañado. En cuyo caso hay que cambiarlos por unos nuevos.

Precio de reparar la centralita del coche

En el caso de que tu centralita se haya averiado el precio de la reparación depende mucho del modelo: entre 500 y 1.500 euros. En el mejor de los casos podría ser solo algún componente menor de ella que se repare fácilmente. Otro caso es que se tenga que clonar la información de tu centralita a una igual de segunda mano. Lo que supone extraer la información y usar un programador para meterla en la nueva o directamente soldar las memorias de tu centralita en la de sustitución (si no han sido dañadas).

En el peor de los casos se tiene que poner una centralita nueva por no disponer de segunda mano. Lo que en muchos casos puede rondar precios de entre 1.000 y 3.000 euros dependiendo del coche para el que se tenga que conseguir. Por suerte, la centralita del coche es un elemento que muy pocas veces se daña a lo largo de la vida útil del coche.

Reprogramaciones de la centralita o ECU

Con todo lo que hemos visto hasta ahora, te podrás imaginar que como la centralita es la que gestiona el motor y sus componentes, es la clave para aumentar la entrega de potencia y par. Efectivamente, la reprogramación consiste en que el motor reciba órdenes más exigentes. Lo que ocurre es que esto se puede hacer de varias maneras y no todas tienen el mismo precio ni tienen la misma fiabilidad. Los tipos de reprogramación y sus precios son:

Chipear el motor (chip de potencia)

Se trata de cambiar las memorias de la centralita de tu motor con una programación diferente. Es lo mismo que se hace cuando se clona una centralita (soldar y desoldar memorias). Las nuevas memorias Flash, EEPROM o la que haya sido necesario cambiar tienen una programación y mapas que demandan más potencia y par del motor.

Su precio depende del modelo y del lugar al que acudas (ve siempre a profesionales), pero oscila entre los 400 y los 700 euros.

Centralita de potencia

Se trata de colocar una segunda centralita entre el motor y la centralita de fábrica. De tal forma que los datos que recibe la centralita del coche son falseados por la que añadimos. El resultado es que de nuevo el motor acaba recibiendo órdenes en las que se le exige más rendimiento.

Reprogramación de la centralita

Aquí se trata de reprogramar literalmente la centralita, ni chipeado ni centralitas secundarias. Es decir, borrar la programación de tu centralita y meter una nueva en la que queda configurada para más potencia. Sin embargo, hay dos formas de hacerlo:

• Reprogramación mediante un ordenador: Esto permite al profesional visualizar en qué estado se encuentra el coche y hacer una reprogramación personalizada. Lo que si se hace bien, permite llegar a la configuración más segura y el mejor rendimiento según cada cliente. Entre 300 y 1.500 euros.
• Reprogramación mediante PPC: se trata de un dispositivo que se conecta mediante la toma OBD. Aquí no hay aporte de valor según el estado de tu motor. Simplemente copia la información que hay en tu centralita para hacer una copia de seguridad y graba la nueva con los mapas estándar que lleve la reprogramación del motor para obtener más potencia.

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Cómo conectarse a la centralita del coche

Para hacer esto simplemente necesitas un Escáner o Máquina de diagnóstico OBD. Con ella podrás ver la información que ha guardado en su memoria. Como te hemos dicho en el apartado de las funciones de la centralita: los fallos registrados por ella y el estado de cada componente del coche.

Su precio suele estar entre los 15 y los 40 euros. Aunque las hay mucho más caras que tienen muchas más funciones. Algunos ejemplos de escáneres OBD son los de LAUNCH, los de EDIAG (la más recomendable) o los de ANCEL.

Imágenes – Nenad Stojkovic, Tim Geers, Klaus Nahr, endolith, 3ndymion, Albertas Agejevas